domingo, 28 de febrero de 2010

SYDNEY

Y ya hemos llegado a Sydney
¡¡¡Que ciudad mas estupenda!!!. Construida toda ella alrededor de una bahía con entrantes y salientes, pequeños puertos, rincones inesperados a cada momento es una ciudad volcada al mar y que ofrece absolutamente de todo a sus habitantes. El famoso edificio de la opera simula unas velas infladas en mitad de la bahía que acompañan a los innumerables barquitos de vela que navegan por los alrededores.
La ciudad tiene de todo, enormes rascacielos, construcciones modernas, actividad portuaria ininterrumpida, campeonatos, carreras, casinos, tiendas de todo tipo, (el fobourg en pleno) grandes y pequeños puertos, teatro, 5 óperas por semana, playas maravillosas a 15 minutos de coche, en fin un sueño.
Hemos hecho de todo, barcos, paseos, coche, monorraíl, autobús, cruce de puentes, una ópera (una extraña versión moderna de Tosca en donde ella es asesinada en vez de suicidarse y en la que el partido dominante al que pertenece el torturador Sforza no es ni más ni menos que la Forza Italia de Berlusconi. Hemos paseado por el puerto principal, por el Darling y por el de Wooloomooloo, donde está el famoso hotel Blue de la cadena Taj, antiguo almacén portuario reconvertido conservando los grandes espacios prístinos de su estructura. El jardín botánico es una auténtica maravilla. Nuestra estancia ha coincidido con la celebración del carnaval (Mardi Gras) y el final del Año Chino. Millones de personas en las calles disfrutando de las fiestas y nosotros sumándonos a ellas. Angel quería hacer puenting desde el puente del puerto y le hemos amenazado con retirarle nuestra amistad para siempre si no desistía de la idea. Los restaurantes estupendos. Hemos comido tanto carne como pescado y siempre desde que llegamos a Nueva Zelanda acompañamos las cenas con un Sauvignon blanco. Los vinos neozelandeses son definitivamente mejores que los australianos Las chicas han aprovechado para hacer las penúltimas compras y nuestro equipaje va creciendo como el vientre de una embarazada. Está a punto de reventar.
El tsunami se acerca a las costas de Australia. Han desalojado todas las playas cercanas a Sydney como medida de precaución. Esperemos que no pase nada. ¡Vaya viaje que llevamos!